En 1927 la Dirección de Puertos llama a licitación para la compra de una grúa flotante para prestar servicios en el Puerto de Montevideo, contandose con la suma de 140.800 pesos. La grúa debería de ser de brazo fijo, de un alcance de 12 metros para las cargas de 50 y 80 (máxima) toneladas, accionada por un mecanismo de maquina a vapor. El pliego insistía especialmente en las condiciones de estabilidad de la grúa y su pontón, que no debería perderse aun en caso de desprendimiento de la carga, estando el brazo cargado con la carga máxima de trabajo de 80 toneladas. Las propuestas presentadas en el primer llamado fueron rechazadas, llamándose nuevamente a licitación con un pliego de condiciones mas concreto, donde se mejoraba la forma de pago y se suavizaban algunas exigencias del anterior.
Este nuevo llamado a licitación limitado a las firmas que se habían presentado al anterior se efectivizo el 12 de agosto de 1927. Entre los licitantes se encontraba nuevamente el Astillero Conrad, que para nada mejoraba la propuesta anteriormente presentada. El constructor no presentaba planos de la grúa ni del pontón, ni de la maquinaria, ademas eran incompletos sus cálculos. Carecía de instalación para la quema de fuel oil, no tenia servicios higiénicos ni local para la tripulación, insuficiente sección de la bomba de salvamento, un solo bote salvavidas y la cantidad de mamparos estancos del pontón era muy reducido, por todo esto se considero que su precio era muy alto.
La mejor propuesta presentada era la de la firma holandesa A. F. Smulder de la ciudad de Schledman, no obstante su precio mas alto por las elevadas condiciones de estabilidad resitencia y disposición general, cuidadosamente estudiadas, así como la garantía de proceder de un fabricante con una vasta experiencia en construcción de grúas flotantes, y por ser también los proveedores de las dragas A1 y A2 que tan buen resultado habían dado a la Administración. Asi mismo contaba con la ventaja de poseer un carro deslizador para 10 toneladas que permitia usar la cubierta para el depósito o transporte de materiales y el aumento del alcance de la grúa a 16,50 metros, aumentando el costo en 16.000 pesos.
Este alcance facilitaría la colocación de grandes blocks monolitos en el exterior de las escolleras del puerto, con la grúa colocada en el lado interior del antepuerto. El costo total con estas mejoras ascendio a 156.800 pesos. El día 3 de enero de 1928 se aceptó la propuesta de la firma holandesa Smulder. En marzo de 1929 arriba a Montevideo con el nombre de H4.
La GF1 15 de noviembre de 1950. Foto ANP.
Eslora mayor sobre las defensas 36,40m.
Manga máxima sobre las defensas 16,40m.
Calado medio cargado con 80 ton 1,20m.
TRB 610.
Capacidad de levantamiento de cargas a dos velocidades.
Levantar pesos de hasta 80 ton a 1 metro por minuto.
Levantar pesos de hasta 50 ton a 2 metros por minuto.
Doble velocidad de descenso.
Distancia entre el extremo de la pluma y la defensa del pontón 16,50 m.
Maxima inclinacion cargada o descargada 1º 45'.
En caso de accidente y que la carga cayera, la inclinación del pontón seria de hasta 1º 30' de la posición normal.
El contrato fue firmado el 11 de febrero de 1928 y aprobado por el Consejo de la Administración el dia 23 del mismo mes.
La grúa flotante H4 fue entregada el 23 de marzo de 1929
En su nueva etapa la GF1 matricula 656, señal distintiva CXMC de la ANP, Administración Nacional de Puertos es vendida al Jefe de Máquinas Sr. Garate después de aprobada la ley de Puertos. Ochos años más tarde Garate la pone en venta y es adquirida en junio de 2003 por el Sr. Jose Luis Cabal, quien sustituye su pontón por otro con dos propulsores Schottel, uno a cada banda
Fui foguists de esa grua...y tengo la chapa de la caldera de bureau veritas
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